Cannabis Recreativo: una Legislación para el Largo Plazo en Colombia

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La primera referencia que hay de la marihuana data del año 2700 a.C. en los escritos del emperador chino, Shen Nung. Dentro de estos escritos, se habla de su uso como medicamento para el reumatismo, la gota, la malaria, el déficit de atención y de sus usos psicoterapéuticos. El 6 de julio del 2016, se reglamentó el uso médico y científico del cannabis en Colombia. La pregunta que queda es: ¿Cuándo se va a reglamentar su uso recreativo?

Fuente: Shutterstock

El proceso de legalización de la marihuana medicinal en Colombia fue de amplia controversia y cada bando tenía argumentos sólidos. Por un lado, el Dr. Carlos Minotta, médico especialista de la Universidad del Valle, proponía que cualquier método que le produzca beneficios a un paciente no debe ser ignorado, además de que un tratamiento con cannabis presenta bajos costos. Por otro lado, el toxicólogo Jorge Quiñónez, de la secretaría de salud de Cali, planteaba que hay alternativas terapéuticas y que la legalización abría las puertas para su consumo recreativo, generando un desorden social.
Después de varios debates en los entes legislativos de la república, se dio la legalización del cannabis medicinal y se originaron cinco publicaciones de resoluciones que establecen las reglas para su producción y transformación. El proceso de legalización empezó con la aprobación en noviembre de 2014 del proyecto de ley que permite el uso de la marihuana paliativa, y apenas en agosto de 2017 culminó el proceso. Tres años tardó el proyecto en ser totalmente aprobado y legalizado, y tan solo a partir de este año fue posible ver empresas con licencias para cultivar.
Ahora, una situación que es evidente en Colombia es que hay un nicho grande de consumidores de marihuana, siendo esta sustancia ilícita la más consumida. Según el Reporte de Drogas de Colombia de 2016, del total de consumidores de sustancias ilícitas, el 87% son consumidores de marihuana. A partir de esto, se encuentran dos factores por los cuales no se ha hecho legal el consumo recreativo de esta sustancia.
El primero se refiere a un pensamiento de corte conservador entre los legisladores. Si se analiza el tiempo que se tomó para legalizar su consumo medicinal, pensar en la legalización del consumo recreativo es pensar en el largo plazo. El segundo factor que afecta esta decisión de ley tiene que ver con un problema de microtráfico de sustancias psicoactivas, generando este un conflicto de intereses que hace improbable, por lo menos en el corto plazo, dicha legalización.
Son estas razones las que hacen pensar en la legalización del consumo recreativo de la marihuana para Colombia como un proyecto aún distante. Primero, el debate está lejos de darse, y segundo, a partir de un primer debate su legalización pasaría por un proceso más amplio y difícil de concretar que el de la legalización de la marihuana medicinal. Para esto debe presentarse un cambio generacional en los legisladores del país, que acepten el gran porcentaje de consumidores y evitar un conflicto de intereses por el microtráfico.

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