El desempeño del sector agroquímico está fuertemente ligado al comportamiento de la actividad agrícola. En este sentido, el PIB agrícola solo creció un 2%, mientras que el área sembrada se contrajo en 11%, lo que plantea un escenario desfavorable para los agroquímicos. De hecho, las importaciones de agroquímicos crecieron a un ritmo lento durante enero y septiembre de 2019, reflejando el moderado crecimiento de los cultivos en el país.
Fuente: DANE. Elaboración: Sectorial.
Adicionalmente, la fuerte depreciación de la tasa de cambio ha actuado como un desincentivo a utilizar los insumos agrícolas traídos del exterior y ha motivado su sustitución por los que son producidos a nivel local o por los orgánicos. Los principales orígenes de las importaciones entre enero y septiembre 2019 fueron Estados Unidos, con una participación del 18,7%, China, con el 15,8% y Rusia, que representó el 13% de las importaciones totales de agroquímicos.
De otro lado, pese a que en el país tienen mayor participación los insumos químicos agrícolas importados, también hay algunas empresas que se dedican a la fabricación de este tipo de productos. Es justamente este segmento del mercado el que puede suplir la demanda interna que se orienta a sustituir los insumos importados por los producidos en el país. De hecho, las ventas reales de productos químicos, que incluyen los de uso agropecuario, fabricados en el país, crecieron un 11,2% entre enero y septiembre de 2019.
Igualmente, una tasa de cambio depreciada hace que los agroquímicos producidos localmente sean más competitivos en el mercado internacional, con lo que pueden vender los excedentes luego de suplir la demanda interna. Muestra de esto es el incremento en las exportaciones de estos bienes, que entre enero y octubre crecieron en 8,6% y tuvieron como principales destinos Brasil, Ecuador, México y Perú.
