Después de muchos meses de especulación, la ex secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, por fin oficializó su candidatura a la presidencia de Estados Unidos, lo hizo a través de un vídeo en el que apoya, entre otras, a las comunidades latinas y LGBTI.
Hillary Clinton y ex presidente de Corea del Sur con veteranos de guerra (2012)commons.wikimedia.org Autor: 대한민국 국군
Parece que Estados Unidos está rompiendo esquemas en materia política, primero con Barack Obama, el primer presidente afrodescendiente, y ahora parece hacerlo con Hillary Clinton, una mujer muy opcionada a ser presidenta de ese país.
Como candidata del partido Demócrata, Clinton aspirará a las elecciones de 2016 y de ganarlas se convertirá en la primera mujer en alcanzar la presidencia de Estados Unidos. La ex primera dama, ya ha tenido una carrera política destacada e incluso ya había aspirado a ese cargo, lo hizo en el 2008 cuando compitió con el ahora presidente Barack Obama.
Clinton recibió el espaldarazo de las mujeres más poderosas de su partido, a quienes preguntó “¿No quieren ver, algún día, una mujer presidenta?”. Mujeres tan importantes como Nancy Pelosi, líder del partido demócrata, expresó que “Hillary Clinton lo tiene todo. Cuando compita, cuando gane, será una de las presidentas más cualificadas de la historia”. Y esa es la opinión que tienen muchos ciudadanos de EE.UU. Para los norteamericanos Clinton representa una mujer poderosa, capaz de llevar las riendas de uno de los países más influyentes del mundo.
La carrera de está demócrata hacia la presidencia empezó con fuerza y se vio reflejada en el discurso que dio a las ejecutivas de Sillicon Valley, que estuvo enfocado en temas como la defensa del esqueleto del argumentario demócrata (una economía de todos, igualdad salarial, bajas de maternidad pagadas), ataques a los republicanos, mención a sus orígenes humildes y a lo logrado en su carrera y referencias a su estrenado papel de abuela.
Hillary Clinton es probablemente la mujer más admirada y más criticada en la historia de los Estados Unidos. Estuvo envuelta en escándalos lo que la tuvo en el ojo público por mucho tiempo, debido a los líos sexuales en los que estuvo involucrado su esposo, el ex presidente Bill Clinton. Sin embargo, 22 años después, en los que mantuvo su carrera política, permanece omnipresente en la esfera pública.
Mantener la relación con su esposo después de esa infidelidad tan mediática la ha hecho blanco de varias críticas, entre ellas ser la imagen de la típica mujer norteamericana que aguanta con sumisión los errores de su marido, un calificativo que dista mucho de los logros que ha alcanzado y del trabajo que ha desarrollado como política de ese país. Sin embargo, muchos críticos no le perdonan la humillación que soportó con el caso Lewinsky en 1998, a pesar de que los republicanos la catalogaran como una feminista radical.
Ese mismo año, en diciembre de 1998, un sondeo reveló que a pesar del escándalo ella disfrutaba de una enorme popularidad, con una aprobación de 67%. Y desde el 2000 ha intensificado su carrera política, cuando consiguió ser senadora por Nueva York, en 2008 disputó la candidatura presidencial por el partido demócrata con Obama. A pesar de haber perdido, con Obama como presidente, Hillary fue convocada para el Departamento de Estado y tras cuatro años consolidó su reputación de estadista y estratega.
Si Hillary Clinton llega a ganar, la Casa Blanca será el hogar de la primera presidenta de los Estados Unidos, que será entregada por el primer presidente de color en ocupar este cargo, y sin duda alguna será un suceso histórico en la política norteamericana. .
