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Dentro de las propuestas que plantearon los centros fiscales de algunas universidades del país, Cedetrabajo, Dejusticia y Fescol al Gobierno Nacional frente a la próxima reforma fiscal, se encuentra la creación de una sobretasa al consumo de bebidas azucaradas en todo el territorio nacional. Los recursos recaudados a través de este impuesto financiarían la salud pública y se estima que el recaudo podría llegar a un billón de pesos anualmente.
En entrevista con W Radio, Alejandro Rodríguez, investigador de Dejusticia, manifestó que la idea es que el recaudo del impuesto propuesto a las bebidas azucaradas sea recaudado por las entidades territoriales y que estos recursos se inviertan en actividades de salud pública, puesto que “la pandemia ya nos demostró la importancia de la salud pública”. Otra de las propuestas que se está planteando para la próxima reforma tributaria es incrementar la tarifa del impuesto predial y volver progresiva la tarifa del impuesto verde.
